miércoles, 1 de octubre de 2008

Perla percudida.

Luna perlada...
Hoy haz visto mi pena,
un deseo abstracto me llama tras cada boca,
mas quedo intrigada dudando de mi sombra.

Albina amada,
eres testigo absurdo de mis lágrimas,
de aquella soledad que soy culpable,
una mentira marchita.

Luna,
he entregado mis suspiros al deseo,
caminando cual bestia mi recuerdo,
suspirando cada altar de momento.

Amiga,
soy una pieza sin par,
no encajo ni en mi propia mente,
y me pierdo cual maldición de viajero errante.

Damita perlada,
¿qué harías tú en mi lugar?,
¿qué vivirías si fueras yo?,
¿cuantas vueltas al mundo daría por ti?.

Señora de lo cielos,
quiciera pasear tus hojas delgadas,
bautizando una nueva vida más lejos de la muerte,
con nuevas esperanzas tardías.

Ama nocturna,
¿no es suficiente castigo salir tal cual al olvido?,
¿no te basta verme inquieta por quienes no lo están?,
¿no te preocupa verme asi?...

Lunita,
bendice por última vez mi vida,
sonría como hoy tras mi desdicha
y brinda por la muerte de esta poetiza.


Shanny - 1/10/2008